¡Hulk aplasta!

Empezaré diciendo que a mi la película de Ang Lee me gustó.
Ahora bien, la secuela que ahora se ha estrenado y que dirige el francés Louis Laterrier, supera en todo a su predecesora.
Y no es porque haya más acción, que la hay, sino por lo que significa en esta nueva etapa de adaptaciones de personajes Marvel al cine que empezó con Iron Man.

Al igual que en el cómic, el Universo creado por Stan Lee, se entrecruza en su paso al celuloide.
El increible Hulk, con Edward Norton en la piel de Bruce Banner (que por cierto esta más acorde con el personaje que Eric Bana), y acompañado por Liv Tyler como una correcta Betty Ross, empieza en las favelas brasileñas, donde nuestro protagonista lleva escondido desde hace 5 años tratando de buscar una cura para su "enfermedad".
Hasta que en su vida vuelve a inrrumpir el General Ross, que lo quiere para crear un ejército de indestructibles soldados.
Para ello contará con la ayuda de Emil Bronsky, un soldado de origen ruso llamado a convertirse en uno de los enemigos más recurrentes del gigante esmeralda.
Aquí es William Hurt quien se pone el disfraz del padre de Betty (un personaje más obsesionado y malvado que el que interpretó Sam Elliot), mientras que Tim Roth se convierte en el mortal enemigo de Hulk.

Viendo esta película es inevitable esbozar más de una sonrisa (y no por su humor precisamente, porque de ello hay más bien poco), sino por la cantidad de guiños y referencias que hay sacados de los comics, sobre todo de la excelente etapa de Bruce Jones.
Y por supuesto a la vieja serie de televisión, con un Bruce Banner en constante huida, los ojos verdes cuando comienza la transformación, e incluso la música, de la que se oyen unos acordes en un determinado momento.
Y como no, el inevitable cameo de Lou Ferrigno.

Aunque este tipo de películas acaban teniendo buena taquilla, ya que cuentan con una publicidad abrumadora, yo me pregunto si gustará a aquellos que no son aficionados a los comics.
Porque una cosa esta clara, los que verdaderamente disfrutamos de ellas por completo, somos los que llevamos muchos años leyendo tebeos de superhéroes, que somos los que captamos todas las referencias que tiene el guión.
Por eso creo que el espectador profano las ve como quien ve una de acción más.

En fin, poco más que decir. Que como película es muy entretenida, y como adaptación es formidable.