lunes, 15 de julio de 2013

Donde estaba yo en el 77



Hoy me siento con la vena nostálgica.
Hace unas cuantas noche, estaba con unos amigos, hablando sobre cine y comics.
Que si has visto la nueva de Superman y que tal esta.
Pues me gusto, aunque creo que esta un poco descompensada. La primera mitad me parece brillante, pero en cuanto se da paso a la acción, creo que la película abusa de los efectos visuales, y hay tanta destrucción, que al final llega a cansar.
La que tengo ganas de ver es la de Star Trek (esta si que es genial, y cumple con la máxima de Hitchcock, de que si empiezas por lo alto, lo que te queda es seguir subiendo.
Un peliculón con todas las letras, que me confirma que en la actualidad, los dos mejores ditectores de blockbusters vienen del mundo de la televisión.
Si J. J. Abrams es uno de ellos, el otro es por supuesto Joss Whedon.

Uno de ellos y yo, coincidimos en que nuestro género favorito es la ciencia ficción.
La película que me marcó siendo un infante fué El Planeta de los simios, con ese inquietante final en la playa.
Luego la cosa derivó en teorías científicas, y sobre si existía la posibilidad de viajar en el tiempo
Ahí la cosa, se disparó, y empezamos a divagar hasta lo absurdo.
Si tuvieras la posibilidad de hacerlo, a donde irías, al futuro o al pasado.
Los dos volvimos a coincidir: Al pasado. y mientras él dijo que viajaría hasta el momento en que se conocieron sus padre, como si de Marty McFly se tratara, yo iría a un momento determinado de mi niñez.
Y ese momento sería el segundo semestre de 1977.


El momento elegido fué cuando llegó a nuestro país, el estreno cinematográfico de la década.
La película que estaba arrasando allí donde se estrenaba, y que arrastraba a una cantidad ingente de cinéfilos a los cines.
LA GUERRA DE LAS GALAXIAS.

Hasta ese momento, jamás se habia visto algo tan grande en el cine.
Si en el año 68, Stanley Kubrick  dió un paso de gigante dentro del género, George Lucas aprovecho eso para hacer del mismo, un espectáculo inimaginable.
Cuando ves eso por vez primera en pantalla grande, su recuerdo es imperdurable.
Un acontecimiento que jamás se olvida.

Y es que no solo es la película, sino el merchadising que generó después, como ninguna antes lo había hecho.
Podías tener en casa a los personajes en forma de muñecos, y si tenías suerte, una réplica del Halcón Milenario.
Yo no tuve nada de eso, pero si tuve mis primeros comics Marvel en color, la adaptación de tan fabulosa película.
Y por suerte para nosotros, los fans, tenía continuación más allá de lo visto en el cine.
El universo expandido comenzaba ahí.
Que grandes eran aquellas historias.


Y que decir de la colección de cromos.
Tener las 187 imágenes a todo color con los fotogramas de la película era una quimera a consequir, a base de comprar sobre y sobres.
Por que si amigos, aunque el dicccionario diga lo contrario, esta si era posible.

Son momentos que tengo grabados a fuego en mi cerebro.
Momentos que se forjarón en mi interior, y que han hecho de mi, la persona que soy.
Con sus virtudes y sus defectos, como todo el mundo, y con unas aficiones que me distinguen de  la mayoría.
Por todo esto, si pudiera viajar al pasado una sola vez, elegiría ese momento.
Larga vida a George Lucas.