Basandose esta vez en un cuento de origen ruso, Tim Burton ejerció de nuevo de director en LA NOVIA CADÁVER.
La historia que cuenta esta película, con canciones y música de Danny Elfman es la de una joven pareja que se tienen que casar por conveniencias familiares, sin apenas conocerse.
Aún asi el flechazo surge a primera vista, pero en el ensayo todo sale mal, debido a un nervioso novio, y este huye adentrándose en el bosque.
Una vez allí, se pone a ensayar la ceremonia, y cuando coloca el anillo en lo que pensaba que era una rama, resulta que era el dedo de una joven enterrada allí, vestida de novia, que fué engañada y asesinada por su prometido.
El cadáver cobra vida, y junto a él se adentrará en el mundo de los muertos, mucho más vistoso y colorido que el deprimente y oscuro mundo real.
Tim Burton hace una deliciosa película, con elementos góticos y de terror en clave de comedia músical, que tan buenos resultados le dió en "Pesadilla antes de Navidad".
Con ella demustra una vez más que va sobrado de imaginación, usando la vieja técnica de la stop-motion, en un cine en el que cada vez se abusa más del ordenador.
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