En 1990, y trás el éxito alcanzado con "Batman",Tim Burton estrenaría la que sin duda es su película más personal: EDUARDO MANOSTIJERAS.
Esta obra, es un maravilloso cuento de hadas moderno, en la que el director muestra su cariño por aquellas personas que son diferentes. Su pasión por los monstruos se glorifica con esta pequeña obra maestra, en donde se muestra la verdadera naturaleza del ser humano, dándonos a entender que los verdaderos monstruos somos los que nos consideramos personas normales.
No quiero contar nada de su argumento, por temor a estropearlo, y por si todavía queda alquien que no la haya visto.
Tim da lo mejor de si mismo, en una película inolvidable, que se queda grabada en todos los corazones de aquellas personas con una sensibilidad a prueba de balas.
Para ello contó con el que desde entonces se convertiría su actor fetiche, Johnny Deep, componiendo un
personaje a su medida.
La princesa de este cuento esta interpretada por Winona Ryder, personaje que en un principio resulta repelente, pero que ira cambiando a lo largo del metraje.
Tambien sale, en una pequeña colaboración el genial Vincent Price, actor venerado por Tim Burton, y que se convertiría en su última interpretación, ya que falleció poco después.
En definitiva, una película de las que hay que ver y guardar. Todo un clásico de nuestro tiempo.
Esta obra, es un maravilloso cuento de hadas moderno, en la que el director muestra su cariño por aquellas personas que son diferentes. Su pasión por los monstruos se glorifica con esta pequeña obra maestra, en donde se muestra la verdadera naturaleza del ser humano, dándonos a entender que los verdaderos monstruos somos los que nos consideramos personas normales.
No quiero contar nada de su argumento, por temor a estropearlo, y por si todavía queda alquien que no la haya visto.
Tim da lo mejor de si mismo, en una película inolvidable, que se queda grabada en todos los corazones de aquellas personas con una sensibilidad a prueba de balas.
Para ello contó con el que desde entonces se convertiría su actor fetiche, Johnny Deep, componiendo un
personaje a su medida.
La princesa de este cuento esta interpretada por Winona Ryder, personaje que en un principio resulta repelente, pero que ira cambiando a lo largo del metraje.
Tambien sale, en una pequeña colaboración el genial Vincent Price, actor venerado por Tim Burton, y que se convertiría en su última interpretación, ya que falleció poco después.
En definitiva, una película de las que hay que ver y guardar. Todo un clásico de nuestro tiempo.
1 comentario:
BUENO NO ESTA MAL PERO PODIA ESTAR MEJOR
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