Allí pasé grandes momentos de mi pre-adolescencia, jugando a la máquina de petacos, matando marcianitos y escuchando los éxitos del momento en una vieja máquina de discos.
De entre todos aquellos hits, había uno que no me cansaba nunca de oir. Se trataba de la canción de Robert Palmer que llevaba por título "Johnny and Mary".

En concreto, yo me imaginaba un historia de amor pre-adolescente. Cosas de la edad.
Y eso que mi amor de la pre-adolescencia, más platónico que otra cosa, no se llamaba María.
Aunque su nombre si que empezaba por M. Y como el mio empieza por J. Pues eso.
Bueno, os dejo con el video de la canción. Que la disfruteís.
No hay comentarios:
Publicar un comentario