
Tracy Lawless vuelve a Estados Unidos, después de una larga temporada en Irak como soldado, para esclarecer el asesinato de su hermano pequeño.
Para ello, se deberá inflintrar en la antigua banda de este, para ir descubriendo que no era como el creía.
Para los amantes del género negro, para los amantes de los buenos tebeos, para los fans de Ed Brubaker.
Vamos, que es un libro recomendable para todo el mundo.
Si los 80 descubrimos a Alan Moore y en los 90 a Neil Gaiman; el nuevo milenio nos ha traido la genialidad de Eduardo el Grande.
1 comentario:
Aún no me lo he comprado, pero el primero me encantó. Brubaker es muy grande.
Publicar un comentario