El debutante Duncan Jones, que resulta ser hijo de David Bowie, nos ofrece una inusual cinta de ciencia ficción en los tiempos que corren.
En tan solo hora y media, nos ofrece una película que nos remite a la gloriosa década de los 70.
La triste y solitaria odisea de Sam Rockwell en la Luna, lejos de sus seres queridos, que va perdiendo la noción del tiempo durante su estancia en nuestro satélite, muestra una clara influencia de films como Solaris, Naves misteriosas, y en menor medida 2001, una odisea en el espacio.
Moon es un impecable trabajo de cámara, que a buen seguro no se les escapara a los goumerts de la ci-fi de calidad, pero que en taquilla pasará con más pena que gloria, a pesar de haber ganado los premios más importantes en el pasado Festival de Sitges.
Hace falta más películas de este tipo, para que aquellos que consideran la ciencia ficción un género menor e infantil callen sus bocas.
2 comentarios:
Que chula se ve esta peli. Aunque yo creo que tiene, sobre todo, influencia de Naves Misteriosas y algo más de 2001 que de Solaris.
La veŕe si tengo oportunidad, of course.
La verdad es que pinta bien esta, aver si el baby y la jefa me dejan un ratillo esta semana, aunque ayer quería verla al tener permiso penitenciario, no elegía yo solo, con lo que la escapada fue por consenso para Infectados, y no se yo si colará dos veces....
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