En su última novela, Nick Hornby abandona sus retratos de eternos Peter Panes, para adentrarse directamenente en la mente de un adolescente.Narrada en primera persona, Todo por una chica cuenta la historia de Sam, aficionado al skate, con una madre todavía joven, que un día, en una fiesta conoce a Alicia, con la que empieza una relación.
Como suele ser habitual en su autor, se trata de un retrato amargo, en este caso de los jóvenes de hoy, no exento de ese humor inglés tan característico.
Ya sean adultos, o como en el caso que nos ocupa los adolescentes, las obras de este escritor suelen girar siempre sobre personas que se niegan a crecer, con miedo a la responsibilidad.
Sabe como hacer para que el lector se identifique con sus protagonistas. Todas ellas estan repletas de humor y ternura, unido a una forma de escribir amena y fluida.
Sus novelas no pretenden transcender, solo ofrecer un entretenimiento digno, a la vez que te hacen reflexionar, aunque solo sea un poquito.
Por eso cada una de ellas, incluida esta última, merecen la pena.
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