Regis Loisel es un apasionado del personaje creado por J.M. Barrie, y esa pasión le llevó a crear su propia visión del mito.
De esta manera, en 1990 saldría en Francia el primer álbum de una serie de seis, que iría desarrollando a lo largo de la última década del pasado siglo y los primeros años del nuevo milenio.
Una obra ambiciosa en la que dió lo mejor de si mismo, y en donde nos cuenta quien era Peter Pan ante de conocer Nunca Jamás.
Peter es un niño taciturno y solitario, cuyos únicos amigos son unos huérfanos con los que juega de vez en cuando.
Hijo de una madre alcohólica y violenta, la única manera que tiene de evadirse de la realidad es contando los cuentos que él mismo inventa a sus amigos.
Pero su vida cambiará cuando en su camino se cruza una pequeña hada rechoncha y juguetona que le llevará a vivir la mayor aventura jamás soñada.
Loisel cruza aquí la obra de Dickens con la de Barrie para crear una sensacional obra maestra, en la que nos muestra como era Peter y los demás personajes de la novela, mucho antes de que supieramos quien era Wendy.
Conoceremos a todos los habitantes de la isla. Indios, sirenas lujuriosas, y como no, a un capitan Garfío antes de que perdiera su mano. Y por supuesto otros personajes de su propia invención, como por ejemplo el fauno Pan, del cual tomará su apellido.
Regis Loisel crea aquí la precuela perfecta de la obra de Barrie. Una obra única y maravillosa, que nos devuelve la infancia perdida.
De esta manera, en 1990 saldría en Francia el primer álbum de una serie de seis, que iría desarrollando a lo largo de la última década del pasado siglo y los primeros años del nuevo milenio.
Una obra ambiciosa en la que dió lo mejor de si mismo, y en donde nos cuenta quien era Peter Pan ante de conocer Nunca Jamás.
Peter es un niño taciturno y solitario, cuyos únicos amigos son unos huérfanos con los que juega de vez en cuando.
Hijo de una madre alcohólica y violenta, la única manera que tiene de evadirse de la realidad es contando los cuentos que él mismo inventa a sus amigos.
Pero su vida cambiará cuando en su camino se cruza una pequeña hada rechoncha y juguetona que le llevará a vivir la mayor aventura jamás soñada.
Loisel cruza aquí la obra de Dickens con la de Barrie para crear una sensacional obra maestra, en la que nos muestra como era Peter y los demás personajes de la novela, mucho antes de que supieramos quien era Wendy.
Conoceremos a todos los habitantes de la isla. Indios, sirenas lujuriosas, y como no, a un capitan Garfío antes de que perdiera su mano. Y por supuesto otros personajes de su propia invención, como por ejemplo el fauno Pan, del cual tomará su apellido.
Regis Loisel crea aquí la precuela perfecta de la obra de Barrie. Una obra única y maravillosa, que nos devuelve la infancia perdida.
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